Obsérvese el castillo de Aguilar, al fondo |
¡Un ataúd! |
Aquellos maravillosos sillones de los 70... |
Hay que informar a los usuarios de los puntos limpios del recorrido que hacen nuestros desperdicios. No es suficiente tener conciencia de la utilidad del reciclaje y la preservación del medio: además, es necesario saber que, verdaderamente, vale la pena molestarse en separar las basuras.
Los restos de poda, los escombros libres de hierros y amiantos, y los restos orgánicos de las actividades agrícolas de la zona pueden tener cabida en este lugar.
No caben los deshechos de talleres de automoción ( neumáticos, parachoques, lunas rotas...) ni los cientos y cientos de cajas de poliestireno que tiran algunos de los pescaderos de la zona...(continuará)
Los vertidos de todos estos materiales y otros ciertamente inverosímiles, deberían estar totalmente controlados y penalizados si fuera preciso, por el ayuntamiento, al que pertenecen los terrenos. Una buena gestión de los residuos no debería depender únicamente de la cuestión monetaria ni de un pequeño ayuntamiento. Hacen falta leyes comunes y sobre todo buenas ideas para acabar con estos espectáculos lamentables que sólo denotan dejadez y falta de responsabilidad.
Gracias Yaya! ;)
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